Donald J. Trump y el Voto Latino

 

Hace tres semanas nos encontrábamos en una reunión en el Trump National de Miami y, una vez el Huracán Milton ya era afortunadamente un suceso pasado, toda la atención en Florida se centraba en quién resultaría el ganador de la próxima elección a nivel nacional, ya que a nivel estatal “pocas dudas existían”.

Entre los swing states que determinarán al ganador en cada nueva elección, en esta última contienda ya no se encontraba el estado de Florida. Y es que, a diferencia de lo que pueda pensar el grueso de la población, los “swing states” no son una realidad inmutable. “The list of swing states is far from static: It changes as voting patterns shift. Florida, for instance, was a key swing state for many years, but has trended increasingly Republican and has lost that status”

https://www.npr.org/2024/11/05/g-s1-32673/which-states-swing-states-2024-presidential-election

Lo curioso para algunos es que, como muchos ya sabrán, en el sur de Florida “se habla español”. La comunidad latina tiene un peso inmenso y, para sorpresa de muchos otros, en Florida, mayoritariamente, se vota rojo. Pero rojo republicano, el rojo del “Grand Old Party” que en esta ocasión abanderaba nuevamente el ya 47 Presidente de los Estados Unidos, Donald J. Trump, tras la jornada electoral del día de ayer.

Una de las preguntas que se hace gran parte de la prensa y la población, mayoritariamente fuera de los Estados Unidos, es ¿por qué los latinos votan a Trump?

Para algunos es la misma tipología de pregunta que en España se cuestionaría por qué en Andalucía se ha votado mayoritariamente al Partido Popular. Pero quizá antes de plantear dicha cuestión, es preciso comprender que los populares, sin ir más lejos, no sólo se proclamaron vencedores en las pasadas elecciones autonómicas de Andalucía del 2022. Si no que también ganaron las últimas elecciones generales del 2023 en la comunidad autónoma más grande de España.

Hagámos por tanto una aproximación al “por qué” del voto latino y el Presidente Trump:

  • PLURALIDAD: La primera cuestión es de sentido común. No se puede hablar de latinos como un grupo uniforme. Ya en el pasado 2020 el Washington Post recordaba que “por primera vez el número de posibles votantes que se identifican como latinos será superior al de los votantes afroestadounidenses. De los 60 millones de latinos que viven en este país, 32 millones son elegibles para votar en un par de semanas -36 millones ya en 2024-, lo cual representaba 13% del electorado total. Son el segundo mayor grupo después de los votantes blancos” https://www.washingtonpost.com/es/post-opinion/2020/10/21/por-que-hay-latinos-que-van-votar-por-trump/ Es cierto que hasta la fecha todos los datos estadísticos aportaban una mayor identificación de la comunidad latina con los demócratas. Pero ante esa realidad plural, como resulte obvio, existirá siempre múltiples preferencias, simpatías y factores que determinen el voto hacia uno u otra opción. El voto latino, por tanto, no es estanco ni uniforme.

 

  • INMIGRACIÓN: Entrando ya en ese subconjunto de issues que puedan determinar el razonamiento del voto, un vector fundamental resultará el posicionamiento del próximo Presidente ante el control migratorio. El latino, quién debe afrontar un doble esfuerzo para integrarse en la comunidad norteamericana, no sólo trabaja duro para ganarse el pan, sino también para ser aceptado en un nuevo país que no es el suyo. Desde el ejemplo y la adaptación a una tierra que quiere considerar su nuevo hogar, parte de esa misma comunidad de latinos ven con temor el riesgo que supone esa minoría de migrantes latinos que, a diferencia del grueso de la comunidad, no respetan los marcos establecidos o sencillamente no hacen el esfuerzo de integrarse en esa nueva realidad. La sensación es perceptible: “no quiero que por culpa del mal hacer de una minoría, la mayoría paguemos las consecuencias con lo que nos ha costado llegar hasta aquí”. En esa dirección y como recogía recientemente El Mundo, “el mayor problema que afrontamos no es la inmigración, sino el control de la inmigración. Tenemos que dejar entrar a los que son trabajadores, no a los que vienen, pero no van a hacer su parte del trabajo”
    https://amp.elmundo.es/internacional/2024/10/31/67237d2de9cf4a740a8b459c.html

 

 

 

  • CAMBIO: Hay una excelente encuesta que compartía semanas atrás el NY Times que exponía con claridad algo que todo actor familiarizado con los procesos electorales entenderá. En esta ocasión, el challenger, la “esperanza por algo diferente”, era Trump. “Incluso más allá del mal estado de la economía, hay algo más profundo que frena a los demócratas: la sensación de que votar por ellos no cambiará mucho las cosas […] Los votantes negros e hispanos no dudan necesariamente de las intenciones demócratas, pero están decepcionados con los resultados. Los demócratas obtuvieron malos resultados en preguntas como si el partido puede “solucionar los problemas a los que se enfrenta la gente como yo”, incluso cuando sobresalieron en “entender los problemas a los que se enfrenta la gente como yo” […] En cierto modo, los demócratas están sufriendo el precio de haber ocupado la presidencia durante 12 de los últimos 16 difíciles años. Hoy, los votantes siguen profundamente insatisfechos con el estado del país y de la economía. Las grandes expectativas no se cumplieron”. https://www.nytimes.com/es/2024/10/14/espanol/estados-unidos/por-que-a-trump-le-va-tan-bien-con-los-votantes-negros-e-hispanos.html

 

  • TERCER CANDIDATO: El pasado mes de junio el mismo NY Times, titulaba “A Robert F. Kennedy Jr. sorpresivamente le va bien con los latinos en las encuestas” https://www.nytimes.com/es/2024/06/13/espanol/robert-f-kennedy-jr-latinos-encuestas.html En esa dirección, otro estudio de PEW RESEARCH, exponía pocos meses atrás que el voto latino estaba empatado entre los dos principales contendientes. “Equal shares of Latino registered voters say they would vote for Biden and Trump in the 2024 election.Roughly a third of Latino voters (36%) say they would vote for or lean toward each of the candidates if the election were held today.” Pero ahí viene lo mejor. Complementariamente a ese dato, y en sintonía a lo ya avanzado por el NY Times, el mismo estudio recopilaba que “Robert F. Kennedy Jr. – a third-party candidate – gets the support of 24% of Latino registered voters. Support for Kennedy is higher among Latinos than among U.S. voters overall (15%).” https://www.pewresearch.org/short-reads/2024/07/19/how-latino-voters-view-the-2024-presidential-election/ Es cierto que Robert F. Kennedy Jr finalmente abandonó sus aspiraciones presidenciales. Pero teniendo, aparentemente, el apoyo de casi 1 de cada 4 latinos, es precisamente su endorso al por entonces candidato Trump, el que también puede haber resultado una variable más que sumase en el resultado final.

 

Ciertamente existirán muchas otras variables de peso que habrán resultado determinantes para el resultado de la elección como la religión, el color/recuerdo de los gobiernos que propiciaron la expatriación en sus países de origen o sin ir más lejos cuál sea el propio país de origen -clave por ejemplo en Florida-, entre otras potenciales variables.

Pero hay algo que todos los estudios muy probablemente terminarán coincidiendo: el “voto latino” habrá resultado parte fundamental para la victoria del próximo 47 Presidente Donald J. Trump. Y ese “voto latino” ha llegado para quedarse. Saber como ganárselo, será cada vez más importante a cada nueva elección.